¿Qué es el TDAIE y cuáles son sus síntomas? ¿Cómo curarlo?
En la entrada ¡ABRE TU VENTANA PARA RESPIRAR AIRE FRESCO!, comentamos lo importante que es mantener la ventana abierta del conocimiento para seguir respirando aire fresco. Si no la has leído, te recomiendo hacerlo antes de leer este artículo y luego regreses con tu ventana abierta de par en par y, con esa disposición, te des permiso de incorporar nuevos aprendizajes, que serán verdadero aire fresco que estimulará tus pupilas, tus fosas nasales y hasta limpiará tu consciencia. ¡Ya lo verás!
Pues bien; en nuestro andar por los nuevos tiempos del aprendizaje, hemos recabado información valiosa que en esta ocasión te comparto como pautas esenciales que te ayudarán -si estás dentro del sector educativo- a trazar nuevas líneas de acción que te permitan acoplarte a las nuevas necesidades de nuestros estudiantes en todos los niveles educativos.
Pero como diría el filósofo, Jack El Destripador… ¡Vamos por partes! Je je. Primero hemos de fundamentar el título de éste post, y no es el invento de la rueda o el hilo negro, sólo se trata de reflexionar respecto a la triste realidad de muchas escuelas que por seguir sus tradiciones, realizan prácticas académicas viejas que lamentablemente a lo único que los ha llevado es a padecer el… TDAIE (Trastorno por Déficit de Atención a la Innovación Educativa)… Y es que como dice la frase… “Si seguimos haciendo lo mismo, seguiremos obteniendo los mismos resultados”… Y peores, agregaríamos nosotros.
Síntomas de TDAIE
Estas escuelas con Trastorno por Déficit de Atención a la Innovación Educativa, inconscientemente creen que sus viejas prácticas o su enfoque hacia lo comercial, les permitirá crecer y sobrevivir para siempre. La mala noticia es que es al contrario, porque también de manera inconsciente, estas escuelas están agonizando poco a poco. Estos son algunos de los síntomas de una escuela con TDAIE >>
Reducción sustantiva de la matrícula.
Clima laboral de estrés.
Bajo rendimiento en el aprovechamiento de los alumnos.
Padres cada vez más intolerables e intolerantes.
Alumnos con actitud limitante y de poco interés.
Falta de motivación por parte de todos los actores: maestros, padres de familia, directivos, y por supuesto alumnos.
Dificultades para mantener relaciones armónicas entre los mismos actores.
Medidas disciplinarias de control.
Butacas o pupitres de paleta.
Pizarrones de gis.
Grupos masivos con 40-60 alumnos en cada aula.
Aún se aplican exámenes y son tradicionalistas.
Toma de decisiones por mandatos jerárquicos.
Festivales tradicionalistas estacionales.
Falta de actividades creativas.
Viendo la lista anterior, suena devastador pensar en el entorno y el clima que se pueda vivir en una escuela con estas características. Y lamentablemente así es… DEVASTADOR.
¿Y luego?
Lo más lamentable y triste en un entorno educativo de esta naturaleza, es el resultado en nuestros niños y jóvenes que en éste momento son víctimas de nuestra inconsciencia, pero al salir de la escuela; serán víctimas de un sistema que les exigirá competencias que no conocen y los devorará a pedacitos, convirtiéndolos en desempleados invisibles que se perderán en el laberinto de la ignorancia.
¿Qué hacer?
Podríamos seguir hablando de la situación actual y las lamentables consecuencias de una escuela con TDAIE, pero la finalidad de éste, y todos los post que estaremos compartiendo contigo, es ver las situaciones con enfoque positivo y en marco de solución. Cabe puntualizar, que por supuesto tenemos que considerar las nuevas necesidades tecnológicas y de infraestructura que requiere una escuela para modernizarse, además de otros factores que son determinantes para dejar de ser una escuela con TDAIE. Sin embargo; en éste post hemos de enfocarnos en un tema sustantivo en el quehacer educativo. Hablo de las prácticas académicas para lograr una enseñanza-aprendizaje útil, funcional y acorde con las necesidades de los nuevos tiempos.
¡La solución del Coaching Educativo!
Aquí tienes 5 sugerencias que te servirán como punto de partida para dejar de ser una escuela con TDAIE.
1. No huyas de tu zona de confort, hazla más grande.
El primer paso es DARNOS PERMISO” de romper paradigmas y abrirnos al cambio para llegar a nuevos horizontes. Debemos entender que el hombre se vuelve sabio cuando pasa del “ya lo sé todo”, al “ya sé que siempre hay algo nuevo y maravilloso que aprender”. Y a partir de aquí, echar a volar la imaginación con deseo en lugar de con miedo, y con ganas de hacer para trascender en lugar de hacer para “tener”.
Estamos hablando de contribuir con el cambio, creando nuevos paradigmas que contribuyan y dejen huella en la gente que te rodea.
2. Enfócate siempre en POSITIVO para descubrir el tesoro del aprendizaje.
Concentrarte en lo positivo te permitirá ver la realidad de diferente manera. Muchas veces lo primero que nos viene a la mente cuando nos preguntan de nuestras experiencias, son los errores que hemos cometido, los fracasos de nuestro pasado o las metas frustradas que hemos dejado en el camino. De esta manera; podremos descubrir que el aprendizaje es permanente y siempre nuevo y vigente.
Si en lugar de eso, cambiamos nuestra postura y nos permitimos ver los errores como oportunidades de aprendizaje, tendremos una nueva visión en la que canalizaríamos toda nuestra atención hacia aprendizajes positivos que nos permitan mantenernos dinámicos y entusiasmados por nuevos y emocionantes desafíos. Y esto mismo debemos hacer con y hacia las personas que nos rodean; llámense alumnos, directivos, maestros, padres de familia, colaboradores, etcétera. Todos tenemos cosas positivas que nos hacen ser únicos y valiosos. La escuela tiene la oportunidad de ver su crecimiento siempre así, con ese positivismo que le permitirá ver que todos los días son diferentes en su ámbito profesional.
“Estamos hablando de contribuir con la evolución de la educación, creando nuevos y positivos paradigmas que verdaderamente aporten y dejen huella en la gente que nos rodea y en el mundo”.
3. Enfócate en SOLUCIONES; los problemas se eliminan solos.
Es imprescindible enfocarnos en las soluciones para resolver cualquier reto en la vida y en el trabajo, porque es nuestra manera de enfocarlo lo que nos impulsa o nos limita para resolverlo. “Podemos ver un desafío como caos, o podemos ver el caos como desafío que nos enseña, nos impulsa y nos empodera”. Desde el momento en que pensamos en la palabra “problema”, ya estamos boicoteando la solución, pues inmediatamente nos bloqueamos y nos sentimos incapaces y hasta nos enojamos porque no encontramos respuestas inmediatas. De ahí nos instalamos en ideas y creencias tipo “no se va poder”, “es difícil”, “nunca lo voy a lograr”, etcétera. En cambio; debemos enfocarnos en ideas con marco de solución como: “es un nuevo reto que enfrentar”, “lo puedo ver desde esta manera”, “¿qué tengo que hacer para resolverlo?”, “¿y si hago esto o aquello?” Es preferible plantearnos todas las soluciones posibles para que de manera creativa obtengamos un abanico de posibilidades que den solución a cualquier problema (reto/ desafío) y ubicarlo en su justa dimensión y realidad.
4. Enfócate hacia el futuro, el pasado ya te lo ganó el tiempo.
Si uno no se arriesga a romper con moldes del pasado, se está perdiendo la oportunidad de ver la magnitud de la riqueza que el futuro nos depara. Además; las siguientes generaciones se verán limitadas en sus potencialidades por no responder a las señales de los nuevos tiempos en el ámbito educativo. Ver hacia el futuro es preparar el terreno para encontrar nuevas alternativas, que posibilitarán una serie de innovaciones que harán posible el despliegue de potencialidades inimaginables. La invitación es que se esté abierto a la innovación y a la motivación de encontrar nuevas formas de enseñar y aprender, que generen el cambio para una nueva forma de ver el mundo que nos rodea. “Cuidado con aferrarte demasiado al pasado, porque no tendrás manos para abrazar un nuevo y mejor futuro”
“Estamos hablando de que, el problema, no es el hecho en sí, sino el enfoque y la actitud ante ese hecho al que llamamos problema”.
5. Sueña y crea tu punto de pasión, será tu escudo ante el verdugo de los miedos.
Sueña como cuando eras niño. Date permiso de volver a imaginar. “No te preocupes ni tengas miedo de echar a volar tu mente, te garantizo que no se va a ir”. Visualiza y de ahí surgirá tu pasión, que es el motor que provoca que todo lo que tienes en la mente, se convierta en acción y luego se convierta en experiencia de vida cotidiana y permanente que contagiará y será huella en tu camino.
“Estamos hablando de crear pasión y actualizarse para hacer realidad los sueños de educar para trascender”. El Coaching Educativo es una manera de hacer realidad los sueños y trascender como escuela divergente y ética.
>>En un próximo artículo, te daré un ejemplo de cómo llevar estas 5 sugerencias a la práctica. ¡Espéralo! “SUEÑA, ACTUALÍZATE y ACTÚA CON PASIÓN”. La mejor manera de actualizarse, es conocer, capacitarse y aprender nuevas y positivas cosas. Hoy tienes la oportunidad de crear una mejor versión de ti mismo(a), para pasar de ser una escuela con TDAIE, a ser una escuela innovadora y congruente que atiende de manera ética las exigencias de los nuevos tiempos.
Coaching Educativo es una de las opciones más actuales, innovadoras y eficaces para actualizarte, pues como bien dice la frase… “Renovarse o morir”. Master Coach Internacional te ofrece la oportunidad de formarte y certificarte en Coaching Transdiciplinario, con programas de vanguardia a nivel internacional. Conoce AQUÍ las características, beneficios y todo lo relacionado con esta técnica que está revolucionando el aprendizaje de los nuevos tiempos. ¡Mucho éxito!